El asesoramiento filosófico es un proceso acompañado de indagación personal para la intervención activa en tu propia vida.

Se realiza de forma individual en sesiones periódicas, virtuales o presenciales, a fin de clarificar preguntas, retos e inquietudes existenciales.

«Cuando más ahondamos en nuestra subjetividad, es cuando somos más objetivos.»

Mónica Cavallé

De la misma forma que vivimos en sintonía con nuestros supuestos y creencias asumidas, también podemos cuestionarlo filosóficamente y transformarnos.

MÁS DETALLES

ENFOQUE SAPIENCIAL

El tipo de asesoramiento filosófico que ofrecemos está inspirado en la Escuela de Filosofía Sapiencial, creada por Mónica Cavallé. Un proceso personalizado de acompañamiento que lleva al consultante a una paulatina toma de consciencia que le ayude a re-orientar su existencia hacia expresiones más creativas y plenas de sentido: más verdad y, en consecuencia, mayor armonía, alegría y presencia.

EL DIÁLOGO

La estructura básica del asesoramiento filosófico es el diálogo, una conversación creativa y abierta que de manera periódica y continuada investigar las cuestiones vitales que el consultante propone. Un diálogo conectado en todo momento con la realidad operativa y el sentir del consultante, que evite caer en desarrollos teóricos o divagaciones mentales. En línea con la mayéutica socrática, se trata de un diálogo basado en la “ignorancia esencial” que no de nada por establecido y todo lo cuestione y examine.

LA VIDA COTIDIANA 

Esta práctica filosófica de auto-expresión está especialmente orientada a la resolución de conflictos existenciales, que no se reducen a un enfoque psicológico. Problemáticas que apuntan hacia situaciones en el día a día de confusión, error o desconocimiento en la forma de actuar, pensar y valorar: cómo nos tratamos a nosotros mismos y a los demás, cómo nos afecta lo que nos pasa, cómo reaccionamos a ello, qué sentimos, qué deseamos, qué rechazamos…

NO INVASIVO

Como práctica de acompañamiento, el asesoramiento filosófico no es invasivo y, ante todo, es respetuoso con el criterio y la autonomía del consultante. Su principal prioridad es procurar que sea el mismo consultante el que ilumine desde su entendimiento aquello que le inquieta o perturba; renunciado expresamente a suplantar y dar consejos o prescribir recetas. En última instancia, trata de llevar al consultante a re-encontrarse con su naturaleza más intima: la belleza, bondad, verdad, libertad que él ya es.

PREGUNTAS FRECUENTES

¿QUÉ ES?

El asesoramiento filosófico es un proceso introspectivo, de trabajo personal, que se realiza en compañía de un filósofo asesor, para reconocer y esclarecer aquellos valores y creencias que están condicionando nuestro día a día.

¿CUÁL ES SU FINALIDAD?

Transformarnos a nosotros mismos dándonos cuenta de la filosofía de vida con la que estamos operando, desde la que miramos el mundo. Afinar, ampliar y profundizar nuestra comprensión y nuestra sensibilidad.

¿A QUIÉN VA DIRIGIDO?

A cualquier persona que desee clarificar su vida y sienta que es una tarea que le concierne y le corresponde, con total independencia de su conocimiento o destreza filosófica. Cualquier persona que de manera sincera quiera auto-conocerse y desplegar su potencial más íntimo.

¿CÓMO SE REALIZA?

Se realiza mediante sesiones individualizadas de una hora de duración que se repiten periódicamente (semanal, quincenal o mensualmente). En nuestro caso las realizamos en modalidad virtual (mediante vídeo conferencia por Internet).

¿EN QUÉ CONSISTE UNA SESIÓN?

Fundamentalmente en abrir un diálogo filosófico entre el asesor y el asesorado a partir de las inquietudes, problemáticas, dificultades o dudas que proponga siempre el asesorado. La función del asesor es de acompañamiento, siempre al servicio de las necesidades, ritmos y tiempos del asesorado.

¿EN BASE A QUÉ FUNCIONA?

Muchas de las dificultades o problemáticas que experimentamos tienen una base filosófica, más que psicológica o de otra índole. Los comportamientos y emociones se sustentan en juicios y creencias que pueden ser indagadas, comprendidas, cuestionadas y transformadas. De esta manera armonizaremos nuestro pensar, actuar y sentir.

¿EN QUÉ SE DIFERENCIA DE OTRAS MODALIDADES DE AYUDA?

El asesoramiento filosófico no diagnostica, ni entra en la dialéctica enfermedad-curación. Tampoco ofrece consejos, prescripciones o fórmulas establecidas. El asesor ni tutela ni tiene la solución, ésta vendrá del diálogo y de la comprensión sentida del asesorado. El asesoramiento filosófico es un compromiso con la verdad y la auto-transformación, no un medio para la obtención de resultados instrumentales. Es una práctica compatible con procesos psicoterapéuticos y otros enfoques de trabajo personal.

¿CUÁNDO ACABA?

Como proceso abierto, dependerá de cada caso, no puede establecerse de antemano una cantidad necesaria o recomendable de sesiones. Aunque, como ocurre con todo proceso de asimilación, sí que requiere ser “cocinado a fuego lento”. En todo caso, la última palabra también la tiene el asesorado.